El 17 de julio de 2015, Jules Bianchi falleció, nueve meses después de su grave accidente en el Gran Premio de Japón de 2014. Su muerte marcó un antes y un después en la Fórmula 1, siendo la primera vez en 21 años, desde el fallecimiento de Ayrton Senna, que un piloto perdía la vida a causa de las heridas sufridas durante una carrera del campeonato mundial.
Un Talento Destinado a la Grandeza
En la década transcurrida desde el fallecimiento de Bianchi, el deporte no ha olvidado al piloto francés, quien parecía destinado a alcanzar la grandeza en la F1. Ya sea a través de los homenajes en cada visita a Suzuka o los constantes tributos de su ahijado, Charles Leclerc, Bianchi sigue siendo una figura presente en las conversaciones sobre el deporte.
Bianchi tuvo una exitosa carrera juvenil antes de llegar a la F1, ganando varias carreras y campeonatos, llamando la atención de Ferrari. Después de una exitosa prueba con la escudería italiana, Bianchi se unió como miembro junior, dando origen a la Ferrari Driver Academy tal como la conocemos hoy. Continuó probando para el equipo durante los años siguientes mientras ascendía en las categorías inferiores, incluyendo el tercer puesto en los campeonatos de GP2 de 2011 y 2012.
El Accidente en Suzuka y sus Consecuencias
El accidente de Jules Bianchi ocurrió en la edición de 2014 del Gran Premio de Japón, en un día miserablemente lluvioso. La fuerte lluvia y la mala visibilidad provocadas por la llegada del tifón Phanfone expusieron las vulnerabilidades de seguridad de la F1 cuando Bianchi se salió de la pista a alta velocidad y sufrió lesiones que amenazaron su vida al colisionar con un vehículo de recuperación en la grava que retiraba otro coche accidentado.
Bianchi sufrió una lesión axonal difusa y nunca recuperó la conciencia antes de fallecer trágicamente en el hospital. Tenía solo 25 años. El piloto francés era el padrino de la actual estrella de Ferrari, Charles Leclerc. Si el destino no hubiera sido tan cruel, es probable que ambos hubieran terminado como rivales en la cima de la parrilla de la F1 en los últimos años.
El Legado de Jules Bianchi
El camino de Bianchi parecía seguro hacia Ferrari. Había sido el primer recluta de la Driver Academy y había estado trabajando duro con la Scuderia detrás de escena, trabajando como piloto de pruebas y reserva junto con sus deberes de carrera en el equipo Marussia F1. Semanas antes de su accidente, Bianchi había probado para Ferrari en Silverstone después de ser llamado para reemplazar a Kimi Raikkonen, quien había sufrido un fuerte golpe durante el Gran Premio. Bianchi había terminado con el tiempo más rápido del día en el F14-T.
Graeme Lowdon, su ex jefe de equipo en F1, lo recuerda con cariño. La memoria de Jules Bianchi sigue viva en el corazón de los aficionados al automovilismo y en la memoria de quienes lo conocieron.