Un duro golpe recibió la selección italiana Sub-20 en el Mundial de Chile, cayendo estrepitosamente por 3-0 ante Estados Unidos en los octavos de final. El encuentro, disputado en el estadio El Teniente de Rancagua, dejó a los azzurrini sin respuestas ante un equipo estadounidense que mostró superioridad táctica y contundencia ofensiva.
Cremaschi, la pesadilla italiana
El joven Cremaschi se erigió como la figura del partido, anotando un doblete que sentenció las aspiraciones italianas. Su velocidad y precisión frente al arco fueron demasiado para la defensa azzurra. El otro tanto estadounidense fue obra de Tsakiris, quien aprovechó un error en la barrera para batir al portero Seghetti.
Italia, a pesar de los intentos de Mosconi y Cama que se estrellaron en los postes, nunca logró encontrar su juego y se vio superada en todas las líneas. La derrota marca el fin de la participación italiana en el Mundial Sub-20 y abre interrogantes sobre el futuro de esta generación de futbolistas.
Más allá de Cremaschi: el talento estadounidense
Estados Unidos no solo depende de Cremaschi. El equipo cuenta con otros talentos como Luca Bombino, defensor con raíces sicilianas que destaca en el San Diego, y Niko Tsakiris, mediocampista con experiencia profesional en el San José Earthquakes.
Talento 'europeo' en la selección estadounidense
La selección estadounidense también se nutre de jugadores formados en canteras europeas, como Diego Kochen, portero del Barcelona, y otros jóvenes promesas que buscan consolidarse en el fútbol profesional. Este crisol de talento y experiencia convierte a Estados Unidos en un rival peligroso en el Mundial Sub-20.
- Cremaschi: Doblete decisivo.
- Tsakiris: Gol clave.
- Luca Bombino: Defensa solida.
- Diego Kochen: Portero con futuro en el Barcelona.
Ahora, Estados Unidos se prepara para enfrentar al ganador del duelo entre Marruecos y Corea del Sur en los cuartos de final, con la ilusión de seguir avanzando en el torneo y alcanzar el sueño de levantar el título mundial.