El INDEC publica hoy el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de junio, un dato crucial para evaluar la trayectoria económica del país. Las expectativas apuntan a una inflación cercana al 2%, impulsada por el aumento de precios regulados, factores estacionales y la ausencia del efecto Hot Sale. Este valor representaría un ligero repunte respecto al 1,5% registrado en mayo, la cifra más baja en cinco años (excluyendo el período de pandemia).
¿Qué factores influyeron en junio?
Según analistas, el incremento en las tarifas de servicios públicos, especialmente gas y electricidad, impactó significativamente en el rubro vivienda. Además, se observó un mayor ajuste en el transporte público. Si bien los combustibles mostraron un aumento moderado, su efecto se sintió en el sector transporte.
Alimentos y Bebidas: ¿Fin de la desaceleración?
Tras el mínimo de 0,3% en mayo, se estima que la suba en alimentos y bebidas alcance el 1,4% en junio. Dentro de este rubro, destacan los incrementos en panificados, lácteos y bebidas.
Implicaciones para el semestre y el futuro
El dato de junio revelará la inflación acumulada del primer semestre, un factor determinante para ajustar las escalas y deducciones del impuesto a los ingresos personales (Ganancias) y las categorías del monotributo. Más allá de la coyuntura, analistas advierten sobre los límites del modelo económico actual, señalando la fragilidad del ancla cambiaria y los desafíos del ajuste fiscal.
Las proyecciones oficiales del gobierno apuntan a una inflación interanual del 22,7% para diciembre de 2025. Sin embargo, el mercado se muestra escéptico, con el Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) del Banco Central (BCRA) estimando un 27,0% para el mismo período.